La tasa de rebote es un factor de influencia para los motores de búsqueda, ya que dependiendo del comportamiento del usuario y del valor esta kpi, los buscadores pueden determinar la calidad del contenido de esa página. Por tanto, tener una baja tasa de rebote es sinónimo de un mejor posición en los resultados de búsquedas orgánicos (SERP).
Por ello, es importante que tu web disponga de una baja tasa de rebote para tener mayores opciones a mejorar tu posicionamiento SEO.
Tabla de contenidos
ToggleGoogle Analytics define la tasa de rebote como el porcentaje de sesiones de una única página en su sitio web. Aunque esta definición podríamos decir que es inexacta, ya que realmente se trata de las visitas de interacción única a un sitio web. Esto quiere decir, que un usuario cuando llega a una página, tras su visita, no vuelve a realizar ninguna acción y sale de ella.
Dicho de otra manera, una tasa de rebote se produce cuando usuario entra en una página y no clica en ningún botón o enlace, ni visualiza ningún video o permanece un tiempo medio y se terminan marchando.
La tasa de rebote de una web suele encontrarse entre un 20% y un 70%. Obviamente no todas las webs tienen la misma tasa de rebote y esta dependerá en muchos casos también del sector al que pertenece y de la procedencia de su tráfico.
La tasa de rebote se produce cuando usuario entra en una página y no clica en ningún botón o enlace
Otro elemento influyente en la tasa de rebote es el tipo o categoría de página web. Según un estudio realizado por Custom Media Labs, dependiendo del tipo de sitio web la tasa de rebote puede ser muy variable.
Como se observa en la gráfica, el comportamiento de un usuario que accede a un e-commerce nada tiene que ver con el que accede a una landing page o un artículo de blog. Este dato es importante tenerlo en cuenta para saber si la tasa de rebote está dentro de la normalidad en virtud de su tipología/categoría.
Existen muchos elementos que pueden ser mejorados en tu sitio web para tratar de mejorar este importante dato y aquí te vamos a dar algunos tips que te ayudarán a mejorar la tasa de rebote de tu web.
Si el contenido de tu web no tienen una buena legibilidad tienes muchas posibilidades de que el usuario pierda el interés y se vaya a buscar la información que desea a otro sitio. Por ello, es importante que tu contenido tenga las condiciones perfectas para que su lectura sea cómoda, clara e interesante.
Algunas mejoras que puedes hacer en este sentido son:
En el posicionamiento seo, el contenido es el rey (según Google). Es por ello que este punto es de los más importantes a tener en cuenta si quieres bajar la tasa de rebote de tu web.
Si tu contenido es pobre será considerado Thin Content (contenido pobre)
Para evitar el Thin Content debes asegurarte de implementar acciones de optimización SEO. Definimos algunas de ellas:
Un diseño feo puede incidir más en la tasa de rebote. Es lo primero que juzgará el usuario cuando acceda por primera vez a tu web.
Por tanto, es importante generar una buena impresión para que el prejuicio se convierta en una oportunidad y no en una debilidad.
Algunas de las cuestiones que deberás de revisar para ofrecer una buena experiencia de usuario son:
Los elementos multimedia ayudan de forma notoria a mejorar la tasa de rebote, ya que este contenido aporta tiempo extra de permanencia del usuario en la página. Por su puesto, para que esto ocurra, este contenido igualmente debe ser de persuasivo y de calidad.
El uso desproporcionado de publicidad puede ser contraproducente de cara a la tasa de rebote, ya que puede resultar molesta y nuestras visitas pueden decidir irse.
Igualmente ocurre con los banners e interstitials, que son un contenido que suele aparecer en muchos casos de forma irruptiva sobre el contenido, bloqueando la lectura del usuario durante el tiempo que este se encuentra visible.
Además, este tipo de recursos fue motivo de castigo en una de las actualizaciones algorítmicas de Google, creando una bajada en los rankings.
Ventajas de hacer Ping Google SEO