Auditoría de redes sociales (I): primeros pasos para realizarla

Cuando comienzas a trabajar con las redes sociales de una marca nueva, no es simplemente tener los accesos a las cuentas y hala, ¡a publicar! Coger las riendas de las redes sociales para llevarlas con sentido y con una estrategia detrás, conlleva un trabajo previo en forma de auditoría de redes sociales. 

En este post, te explicamos cómo realizar los primeros pasos de esta auditoría. 

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¿Cuándo puedes hacer una auditoría de redes sociales?

Lo primero que debes saber es que realmente una auditoría de redes sociales se puede hacer en cualquier momento. Desde marketinhouse recomendamos realizarla cuando comenzamos a trabajar con una marca nueva, para saber en qué estado se encuentra y cuál es el progreso de los objetivos planteados. 

Si crees que tus redes sociales necesitan un giro o un lavado de cara porque no están consiguiendo lo que buscas, es el momento de realizar la auditoría. Sigue los pasos de este artículo y podrás ver su estado actual y cómo puedes mejorarla. Y si no tienes tiempo o te sientes perdido, nuestro equipo de redes sociales estará encantado de ayudarte. 

Auditoría de redes sociales: identificando el punto de partida

Puede parecer una tarea tediosa e innecesaria, pero con este análisis de la marca podrás:

• Detectar los puntos de mejora.
• Identificar los canales que mejor están cumpliendo los objetivos planteados.
• Encontrar nuevas ideas y estrategias de contenido.
• Conocer mejor al público objetivo y a los competidores de la marca.
• Mejorar o replantear la estrategia usada hasta la fecha.

Como ves, son todo ventajas, así que… ¡Allá vamos!

1. ¿De dónde partimos?

Lo ideal, es partir de un briefing previo proporcionado por la marca en donde se detallen lo siguiente:

1. Canales
2. Objetivos
3. Frecuencia de publicación
4. Casos de éxito y errores
5. Resultados en cifras.

Es importante que la marca proporcione esta información antes de continuar con la auditoría de redes sociales: es ella quien ha de tener claro estos puntos, especialmente los objetivos y los resultados en cifras. 

Los resultados numéricos son una forma de cuantificar el éxito de una publicación o contenido, por lo que es imprescindible tener datos sólidos de los que partir.

Por ejemplo, en un concurso en el que se pide dar like y comentar X cosa, el cliente puede considerar que funcionó muy bien… Pero luego mirando las cifras de interacción ves que obtuvieron 1.200 likes y 10 comentarios… Tan bien, tan bien, no funcionó, ¿no crees?

¿De dónde sacamos los datos?

Puedes nutrirte de herramientas como:

• Estadísticas de las redes sociales: Instagram Insights, Creator Studio…
• Herramientas externas: Metricool, Audiense, Hubspot, Hootsuite, Later…

2. ¿Están cumpliendo los objetivos?

Con las herramientas anteriores y el briefing entregado por la marca, podrás comprobar rápidamente si los objetivos marcados en el pasado se están cumpliendo o no. 

¿Y si no tienen objetivos definidos?

En ese caso, toma una panorámica del estado de las redes sociales con las métricas de interacción más relevantes (comentarios, compartidos, guardados, etc.) y la evolución de los seguidores. 

Es importante que dispongas de datos de un periodo suficientemente largo (por ejemplo, el último año), y no solo del último mes, para ver la tendencia e identificar rápidamente los picos que hubo en la interacción y seguidores. 

3. Cómo saber qué ocurrió en los cambios de tendencia

La opción más sencilla y directa: preguntar al cliente. 

Si el cliente no sabe exactamente qué se hizo, es momento de que realices un trabajo manual e ir a las herramientas de las plataformas (Facebook, Instagram…) o de terceros (Metricool, Later…) para comprobar qué se hizo en especial en la publicación que provocó ese cambio de tendencia. ¿Quizá un concurso? ¿Una colaboración con influencers? ¿Social Ads?

4. Calidad de los seguidores

Muchas veces nos encontramos con cuentas que tienen decenas de miles de seguidores; sin embargo, sus cifras de engagement son muy bajas. 

Esto puede deberse a varios factores:

• Por un lado, que el contenido que estás creando no engancha lo suficiente a los seguidores como para interactuar. Plantéate si en las publicaciones se ofrece contenido de valor o simplemente son posts comerciales en donde se intenta vender el producto o servicio.
• El alto volumen de seguidores se debe a concursos pasados y por tanto no terminan de ser el target objetivo de la marca. Comenzaron a seguir la cuenta en un momento puntual para conseguir el premio que ofrecías, pero no porque realmente les interesara lo que se publica.
• Los seguidores son bots.

¿Cómo saber si los seguidores son de calidad?

Al igual que en los puntos anteriores, tenemos dos formas:

• La forma manual: selecciona varios seguidores al azar y comprueba sus perfiles. ¿Son activos en la plataforma? ¿Tienen foto de perfil? ¿Siguen a muchas más personas de las que le siguen a él o ella?
• Con herramientas como Socialblade o hypeauditor.

Una vez tengas estos 4 puntos analizados y completos, tendrás una visión detallada del estado de las redes sociales de la marca. A partir de aquí, podremos valorar nuevas estrategias para la consecución de los objetivos. Pero esto ya merece otro artículo aparte ☺ ¡Pronto lo publicaremos!