¿Quieres crear un sitio web o tienes una web a la que quieres hacerle un cambio pero no sabes por dónde empezar? La planificación será tu mayor aliado. Desde marketinhouse queremos ayudarte y enseñarte cómo planificar un proyecto web desde cero para que puedas atacar todos los puntos importantes de tu negocio y obtener la web más efectiva y atractiva posible para tu target.
Conoce bien el proyecto web
Antes de meterte de lleno en el proyecto de diseño web deberás tener una visión global del proyecto, para ello te recomendamos que definas los siguientes puntos:
- Definición del objetivo: Se debe establecer de forma clara y precisa el objetivo del proyecto.
- Identificación de requisitos: Es importante identificar los requisitos del proyecto, incluyendo las funcionalidades, las necesidades de los usuarios y cualquier otro requisito específico que pueda tener el proyecto.
- Creación de plan de proyecto: Se debe desarrollar un plan de proyecto detallado que incluya plazos, recursos, tareas, responsabilidades de cada miembro del equipo y los presupuestos previstos.
- Asignación de tareas: Es importante definir claramente las tareas, responsabilidades y plazos para cada tarea. De este modo podremos asegurarnos de que el proyecto avanza de forma eficaz.
- Establecimiento de plazos: Punto fundamental en cualquier proyecto. Es necesario establecer plazos de forma realista teniendo en cuenta cualquier factor que pueda influir como otros proyectos en los que está involucrado el equipo o periodos de vacaciones.
Una vez tengamos claros estos puntos podemos desarrollar más en profundidad las fases del plan del proyecto.
Fases para planificar un proyecto web
El diseño web es un proceso complejo que requiere varias fases para asegurar que se ajuste a los objetivos y necesidades de la empresa. Las fases principales del proceso de diseño de un proyecto web son:
Fase 1: Investigación y análisis
Fase imprescindible, con ella conoceremos la competencia y los usuarios. Esta fase implica analizar los sitios web de los competidores para conocer sus fortalezas y debilidades. También conocer las necesidades y expectativas de nuestros visitantes. Sin olvidarnos de la propia identidad de la empresa, habrá que estudiar en profundidad nuestros servicios, qué ofrecemos, qué nos hace diferente al resto, qué buscamos a largo plazo.
Fase 3: Arquitectura de la información
Fase en la que se define la estructura del sitio web. En esta fase nos encontramos con una de las tareas más importantes, la creación del mapa del sitio definiendo cuales son las páginas o secciones principales de la web teniendo en cuenta la navegabilidad. Generar una arquitectura coherente para que el usuario pueda navegar en la web fácilmente y encuentre la información que busca es vital para cualquier negocio.
Fase 4: Diseño de bocetos, wireframes y diseño visual
Una vez establecido los objetivos y la estructura toca darle forma. Los bocetos y wireframes ayudan con esquemas simples a ver la estructura básica del sitio web y muestran cómo se relacionan entre sí las diferentes secciones.
Como segundo paso debemos hacer el diseño visual, lo que le da al sitio web su apariencia visual y su personalidad. Este elemento puede ser un factor determinante para el éxito del sitio web ya que puede influir en la percepción y la experiencia de los usuarios. A la hora de ejecutar esta tarea es necesario tener en cuenta varios elementos clave: colores, tipografía, imágenes, espacio en blanco,coherencia visual…
Desarrollo web
Una vez creado el diseño visual se puede comenzar a desarrollar el sitio web. Durante esta fase se tienen en cuenta funciones interactivas como formularios, animaciones y efectos visuales.
Pruebas y optimización
Cómo fase final es importante realizar pruebas para comprobar que toda la web funcione correctamente. Y que la navegabilidad sea la correcta y sea fácil de usar para los usuarios. Se pueden utilizar herramientas de análisis para medir el rendimiento y la usabilidad del sitio web. Lo importante es testar la web, comprobar que podemos acceder a cada una de las secciones y páginas con un sentido lógico e intuitivo para el usuario.
En definitiva, planificar un proyecto web puede ser algo complejo, todo dependerá del tamaño de la web y los objetivos que nos planteemos. Pero si algo está claro es que con una buena planificación podrás encontrar la mejor opción de diseño web para tu negocio.
